Sin dejar huellas es un thriller que cuenta con todos los elementos para ser llamada así pero que los utiliza de una forma distinta para generar tanto ansiedad como morbo en quienes la vemos. La historia es sencilla. Primero conocemos al detective François Visconti (un genial Vincent Cassel) a quien se le asigna el caso de la desaparición de un adolescente.
Atrapado entre la desintegración de su propia familia y la necesidad casi obsesiva de encontrar al adolescente perdido, Visconti se enreda en una investigación que a cada paso parece cerrarse el camino ella misma. Las presiones profesionales, su compleja vida personal y la cacería de un sospechoso al que quien ve la película también quiere ver como culpable, se entrelazan en la narración para estirar los nervios hasta el máximo posible. Entrar a este universo se convierte pronto en una experiencia oscura pero irresistible.
CONOCE MÁS. Esta es la crítica a la película Amor mío, protagonizada por Vincent Cassel.
Esta es la videocrítica de Erick Estrada a la película francesa Sin dejar huellas:
Sin dejar huellas
(Fleuve noir, Francia-Bélgica, 2018)
Dirige: Erick Zonca
Actúan: Vincet Cassel, Romain Duris, Sandrine Kiberlain, Carles Berlin
Guion: Erick Zonca, Lou de Fanget Signolet
Fotografía: Paolo Carnera
Duración: 113 minutos.
