TIFF 2020: Another Round, la crítica de Erick Estrada.

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TIFF 2020
Another Round
La borrachera perpetua
Por Erick Estrada
Cinegarage

Lo que propone Thomas Vinterberg en Another Round es el viaje de Ícaro. Lo hace a través de una historia tan simple como la del hijo de Dédalo, con gente común y corriente atrapada en la rutina insalvable en nuestros modos de vida. Sus personajes, maestros y hombres atrapados en el ir y venir sin creatividad de un trabajo que se ha transformado en un laberinto circular, deciden de repente que pueden volar y salir de su encierro mental, emocional, sexual, laboral, interminable. Pero también deja expuesta de manera muy clara la cera con la que se fabricaron las alas que usan para salir de esos pasajes de hastío. La prueba es el nombre original de la película. Druk del danés al español comunica no una palabra sino una idea: consumo excesivo de alcohol.

¿Será que además de mostrarnos las alas de Ícaro nos pondrá en primer plano y en detalle la forma en que se desprenden de sus brazos?

Conocemos a Martin (Mads Mikkelsen trabaja de nuevo con Vinterberg y explota en un trabajo creativo y lleno de poder), Tommy, Peter y Nikolaj. Ellos son los profesores que en un momento de locura concentrada deciden acercarse al Sol para transformar sus vidas. En la justificación de su cambio de rumbo una teoría tan racional como escapista les habla de la insuficiencia nata de alcohol en la sangre del ser humano. Esa insuficiencia puede ser compensada si se consume alcohol de manera habitual en cantidades controladas al mililitro. La película es también una alegoría de la amistad y el reencuentro de aquellos a quienes se quiere pero se tenía olvidado en la maquinaria de la rutina contemporánea. Por ello nos deja ver a los cuatro camaradas establecer el pacto que los invita a la compensación alcohólica de sus días y la renuncia al alcohol recreativo.

El escape de su laberinto se abre ante sus ojos. Y el escape funciona.

En una especie de borrachera perpetua, profesional y controlada Vinterberg (en el cuerpo y alma de Martin) explora el ascenso para encontrar la iluminación. El alcohol es un vehículo místico tanto para las religiones consolidadas como para las herejías y Another Round lo muestra y lo explota con anécdotas cotidianas, tangibles y eso le da un aroma de trascendencia completamente despojado de pretensión. De la mitología a la mística.

Con ello en mente el alcohol y su presencia en nuestro cotidiano se convierte en el discurso. ¿Cómo nos relacionamos con él y cómo lo usamos para ascender desde Baco hasta Apolo y también para dejar que corra libre lo que el imperio de la razón oprime casi por default? ¿Cuándo está presente y cuándo no? ¿Debería ser así? ¿La vida contemporánea nos ha obligado a olvidar nuestra relación con los dioses?

En el guion que Vinterberg escribió al lado de Tobias Lindholm (estupenda mancuerna) aparecen pequeños saltos hacia la juventud, ya sea la que se recupera en la borrachera con el riesgo de perder las alas o en el jugueteo que los alumnos de esta cuarteta tienen con el alcohol. ¿Another Round habla del regreso a la juventud o de la pérdida de la inocencia?

Y de repente Ícaro vuela muy cerca del Sol. Al escapar de su encierro estas cuatro mentes que han recuperado el hambre por la experimentación en y de sus propias vidas chocan de frente con las consecuencias de la opresión torpe de lo apolíneo a través de la banalización de lo dionisiaco.

Construida con tacto, con un lenguaje móvil la película muestra ambos lados de la moneda. El ascenso y la caída, la iluminación y la maldición, la borrachera divina y la resaca mortífera. Porque no hay juicio ante la entrega completa al dios que ilumina. Porque probablemente no hay un dios. Sin juicios pero con una narración que nos deja evaluarlo todo esto es un viaje mitológico, politeísta, sin absolutos. Justo lo que necesitamos en las historias del 2020 plagado de radicalizaciones y tan negado de matices.

En Another Round la parte creativa de la droga no silencia su faceta destructiva. Y al revés tampoco ocurre.

En este viaje se pagan las consecuencias de volar muy cerca del Sol pero como deja claro su última secuencia el placer de volar con las alas que nos regalan los dioses es inconmensurable y la caída desde esas alturas se mide de la misma forma. Se puede ser pesimista y optimista a la vez. Se puede ser mucho más humano al aceptar que somos falibles. Ese es el viaje que realizamos al lado de Martin.

CONOCE MÁS. Esta es la crítica de Erick Estrada a Never Gonna Snow Again, película que Polonia postula al Oscar presentada en el TIFF 2020.

Another Round
(Druk, Dinamarca, 2020)
Dirige: Thomas Vinterberg
Actúan: Mads Mikkelsen, Thomas Bo Larsen, Lars Ranthe, Magnus Millang
Guion: Tobias Lindholm, Thomas Vinterberg
Fotografía: Sturla Brandt Grøvlen
Duración: 115 minutos.

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