Los elegidos
El regaño extraterrestre
Por Erick Estrada
Cinegarage
La advertencia estaba lanzada: del departamento de producción de Los elegidos salía una y otra vez el nombre de “Actividad paranormal”, de la uno a la cinco. Ese departamento diseñó lo que aquí se llama (vendiendo el final de la película) Los elegidos y que en inglés lleva el un poco más misterioso nombre de Dark Skies (“Cielos oscuros” podríamos decir).
Con una señal tan clara no había manera de esperar más y efectivamente la película no entrega mucho. Sin pedir prestado y sí copiando descaradamente momentos, encuadres y situaciones de películas de contacto extraterrestre (a Spielberg debieron convencerlo de que les prestara los story boards para que cualquier posibilidad de demanda quedara impedida por un arreglo amistoso), la cinta plantea el inexplicable acecho (que echa a perder el nombre en español) de algo o alguien sobre una típica familia americana.
Este acecho, que no consigue despertar ni uno solo de los temores que otras películas explotan con menos esfuerzo, termina por demostrar que, teniendo a Actividad paranormal en el salón de juntas, la narrativa estaba limitada o condenada (me gustaría saberlo un día) a regresar a esa raíz.
La prueba es que los momentos de acecho sobre la familia son idénticos a los momentos “tensos” de las “actividades” pasadas, solamente que aquí no se trata de espíritus o demonios, sino de visitantes de otros mundos, aliens, extraterrestres; y tampoco se trata de la cámara borracha grabado todo desde el hombro de uno de los personajes pero que hace tomas idénticas a ella.
Lo peor, al tratar de desenredar el problema, el padre de esta lánguida familia decide colocar cámaras de vigilancia dentro de su casa y así, de golpe y sin anestesia la película se vuelca en el monitor de la computadora y en esa “forma” de “contar” a través de cámaras de video en un circuito cerrado de seguridad: la maldición de Actividad paranormal se hace presente junto a los visitantes de otros planetas.
Si se trata de una mezcla de terror y ciencia ficción, es lo de menos. Si se quiere contar una historia de casas acechadas como incluso Poltergeist (EUA, 1982) lo hizo (y de la que también copian más de un momento, especialmente en el final), tampoco importa. Los elegidos, en medio de este embrollo y este minimalismo de circuito cerrado, es solamente una película con un final muy abierto, diseñado para, si se descuidan (bastante) hacerlos sentir mal por no poner atención a las necesidades de la familia, por no escuchar a sus hijos, por no estar cerca de ellos.
Es un regaño extraterrestre tan transparente que sabe moralino en medio de una supuesta historia de terror cósmico. Seguro Scott Stewart (director y guionista) jamás leyó al maestro H. P. Lovecraft.
Dark Skies
(EUA, 2013)
Dirige: Scott Charles Stewart
Actúan: Keri Russell, Dakota Goyo, J.K. Simmons, Josh Hamilton
Guión: Scott Charles Stewart
Fotografía: David Boyd
Duración: 97 min.
