La reina infiel, crítica

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¿La reina infiel?
A Royal Affair
Por Erick Estrada
Cinegarage

Imagino la escena. En el departamento correspondiente revisan de prisa la película ganadora del Oso de Plata al Mejor Guión en la Berlinale y, como van extremadamente de prisa antes de salir un jueves por la tarde a beber ron con cola, jefe y subalterno ven sobresaltados las escenas en las que una chica que sabemos es reina de Dinamarca decide mandar al cuerno al rey y se enreda con alguien que aparece ahí no sabemos desde dónde. “¿Entonces cómo le ponemos?” cuestiona el subalterno. “Pues ya vimos lo que había que ver. Es la reina, ¿no?, se acuesta con el otro, ¿no?, Ponle La reina infiel y vámonos”.

Imagino la escena y lanzo un rugido al aire.

La película de Nikolaj Arcel rescata la historia del matrimonio del Rey Christian VII de Dinamarca y Noruega, un gobernante más bien errático y fallido vayamos a saber por qué causas psicológicas desconocidas en su tiempo: el hervidero de la Ilustración en la segunda mitad del siglo XVII. Caroline Matilda de Gales fue obligada (como se acostumbraba en la época) a casarse con Christian y al unir a dos personajes tan distintos, una mujer educada y de pensamiento vanguardista con un rey débil y enfermo mentalmente, Arcel encuentra la excusa para desenmascarar lo machista de una época en la que el el falo del Rey era considerado bendito y las mujeres, por más reinas que fueran, eran tratadas como instrumentos para parir hijos, preferiblemente varones.

Alrededor de ello y con una minuciosidad visual casi hipnótica, Arcel habla sin darnos lecciones de época, de lo corto de las mentes gobernantes de esos años (y de paso de las caducas y obsoletas monarquías actuales), de la opresión de un género (el femenino) bajo otro (el masculino); habla de lo necesario del pensamiento vanguardista, de la ambición política y sus casi siempre funestas consecuencias, de los derechos humanos indispensables que, para rematar, en esa época eran negados primordialmente a las mujeres.

En la historia (y es aquí donde le ganaron las prisas al departamento de bautizos de películas extranjeras), la reina decide tomar las riendas de su propia vida, deshacerse del Rey sin abandonar la corte para enamorarse (esas decisiones también se toman) de quien la hacía más feliz que, de casualidad, era el médico del Rey, Johan Friedrich Streunsee, también libre pensador, vanguardista, ávido lector de Russeau y con quien encabeza una serie de cambios a beneficio de su pueblo.

Si lo vemos así, la “infidelidad” no resulta tan banal (agreguemos que el cambio de parejas era común y hasta bien visto en las cortes) y la mujer a la que machista y despectivamente se califica como “infiel” resulta ser alguien vanguardista, innovador y una gobernante, además, que consiguió cambiar las miras de un país tan conservador como lo era Dinamarca.

Hay mucho valor visual, buenas actuaciones (reparece por ejemplo Mads Mikkelsen a quien vimos en La caza) y dosis de buen drama en vestuarios que ahora resultan completamente exóticos y sin embargo, su discurso primordial es el de las libertades, la equidad de género y, si quieren, del amor verdadero. Por eso resultan tan retrógado rebautizar a esta película como “La reina infiel” en lugar de usar el nombre verdadero, A Royal Affair (En kongeling affaere en danés), en donde la palabra affair engloba desde los asuntos de política interna hasta la necesidad de reformar tanto a la corona como al país y, claro, el enamoramiento de dos personas que entre otras cosa compartían visiones políticas y humanas muy similares.

Imagino la escena y me lamento.

A Roya Affair
(En kongeling affaere, Dinamarca-Suecia-República Checa, 2012)
Dirige: Nikolaj Arcel
Actúan: Alicia Vikander, Mads Mikkelsen, Mikel Boe Følsgaard, Tryne Dyrholm
Guión: Bodil Steensen-Leth, Nikolaj Arcel
Fotografía: Rasmus Videbaek
Duración: 137 min.

Comments (5)

  1. la verdad no me llamaba la atencion ver esta pelicula pero desde que vi a Mads en Hannibal se me hiso buen actor y la verdad me encato la pelicula ahora me falta ver the hunt ah y Mikel Boe espectacular tambien

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  2. También me pareció muy retrogrado el título! la película trata de temas tan valiosos e interesantes y la etiquetan con uno que ni siquiera es el principal ni el mas “interesante”. Por eso odio las distribuidoras mexicanas…

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  3. Aunque no siempre comento, siempre leo o veo tus críticas. En algunas estoy de acuerdo y en otras no. Pero sí me gustaría que hicieras críticas de todas las películas que se estrenan cada fin de semana, aunque te parezcan muy malas, como supongo que te pareció Oz.

    Ojalá la pudieras hacer. Saludos Erick

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